Si teníamos ganas de que se fuera el 2020, me da la impresión que más ganas vamos a tener de que se vaya el 2021, tal y como ha comenzado el muy puñetero. Nueva ola de la pandemia, lentitud en las vacunaciones, confinamientos selectivos… y para remate de la primera quincena del año, llega Filomena y pone a media España al borde del colapso total. Menos mal que por aquí, no hemos bajado de los cero grados, que, si no, vuelven los tractores a echar otra mano, esta vez para hacer de quitanieves por el viario. Y de seguro que veríamos también a más de un patriota en la puerta del Ayuntamiento, pala en mano, para justificar la nómina. Y es que Carmona nevada es una preciosidad. Cada cincuenta años, pero preciosidad. Menos mal, que somos postal, porque si nevase con más frecuencia, no sale a la calle ni el fotógrafo oficial del Consistorio.
Y es que a los carmonenses no hace falta que Juanma les diga que hay que confinarse voluntariamente, es que Carmona lleva confinada desde hace años. Y si tiene dudas compruébelo usted mismo, y a los datos de población me remito, sobre todo a los que hacen referencia a los niños, que son el futuro de la ciudad. Esa es la clave. Los niños -por mucho confinamiento que haya- tienen que jugar en la calle, tomar el sol, compartir amigos, descargar energías… y todo aquello que hace latir un pueblo con la esperanza puesta en el
futuro de sus gentes. Si después de comprobar que se ven pocos niños (de ambos sexos se entiende en todo el texto) por plazas, plazuelas y alamedas, o al menos así lo percibo tras corretear al aire libre detrás de mi nieto, habrá que reflexionar al respecto, porque nos jugamos mucho, tanto los sexagenarios como los jóvenes que llegarán a serlo.
Tal vez, haya incrédulos sobre el envejecimiento de Carmona y sus consecuencias, como hace más de treinta años, cuando un inspector de enseñanza, antes de presidir una reunión de escolarización en la que estuve presente, se personó en el Ayuntamiento para recabar datos de la población y su evolución. Tras ponerlos sobre la mesa y analizar los mismos, sentenció a todos los presentes -ediles, representantes de padres de alumnos, profesorado y personal- que, por muchas reivindicaciones sociales en materia de nuevas construcciones escolares en la ciudad, el futuro deparaba, a corto plazo, la reducción inexorable de unidades escolares e inversiones en infraestructuras.
No había que ser sabio, pero sí buen funcionario, para emitir un informe veraz y elevar las conclusiones a la superioridad, sin más añadidos que la pirámide poblacional y la situación de los vetustos edificios escolares de la época. No fue profecía, sino cordura lo que llevó a Carmona a encontrar un equilibrio entre oferta y demanda escolar, en tiempos difíciles en el que el colegio de las Hermanas de la Cruz pedía el cierre por cuestiones internas de la propia congregación. El presente arrastra la misma problemática -a pesar de la reducción en la ratio, la ampliación máxima de la Educación Infantil y la irrisoria publicidad y competitividad entre centros- y que no es otra que: La falta de niños. Y esto no se arregla con poner un parque infantil en cada esquina, un columpio en cada zaguán o una ciudad entera para ellos. O se aborda el apoyo a la natalidad, a potenciar ayudas a los matrimonios jóvenes, al acceso a la vivienda a las nuevas familias, o Carmona se verá avocada las veinticuatro horas del día a la soledad del confinamiento generacional. ¡Fran, ahí viene otro niño! Venga, a jugar, ¡que todo el Paseo es vuestro!
El joven cineasta, Mateo Cabeza Rodríguez, de profundas raíces familiares en Carmona, da un paso de gigante en su carrera cinematográfica con un documental cortometraje seleccionado para competir para los premios Goya. "Paraiso" es una obra de arte realizada en una habitación del Hospital Infantil Virgen del Rocío de Sevilla.
Según la OMS, lavarse las manos puede ayudarnos a prevernir hasta 200 enfermedades.
Un gesto tan sencillo y que muchas veces olvidamos, como es lavarse las manos, puede ayudarnos a tener mejor salud
"La eutanasia no es un asesinato. No es una alternativa a los cuidados paliativos. Hay dolores que ningún cuidado puede aliviar. Hay situaciones en las que sólo la muerte puede salvarnos. La vida es un bien si es una buena vida. No puede serlo cuando el dolor es el único protagonista de todos y cada uno de nuestros instantes".
Y es que hoy hace dos años que entré en un quirofano para comenzar a ganarle la batalla al cáncer. A la misma hora que escribo estas líneas, el Doctor Javier Valdés, cirujano del Hospital Virgen Macarena, estaba operándome junto con su equipo. Después de siete horas en el quirófano, una ileostomía y casi dos días vigilado en la sala especial postoperatoria, me trasladaron a mi habitación en la tercera planta del hospital donde me esperaba mi famila, llegué que casi no podía moverme y con el cuerpo "cortado" como le dije a la enfermera, quien me contestó con todo su arte, "no vas a traer el cuerpo cortado si te acaban de operar.....
A partir del próximo martes, los usuarios del SAS, recuperarán las citas presenciales y dispondrán de medidas especiales de cara a la seguridad higiénico sanitarias en los centros de salud. Así lo anunció, entre otros temas de interés general, el consejero de Salud y Familia de la Junta de Andalucía Jesús Aguirre. En Carmona, la campaña de vacunaciones prosigue con una segunda jornada que tuvo como principales beneficiarios al personal docente de Educación Infantil.
Como buque insignia del comercio local, la calle Real fue la vía por excelencia para montar un negocio. Eso fue el ayer. El hoy más bien nos recuerda un naufragio que deja huella a cada paso. Unos, no prepararon al personal para la reconversión de un sector que nunca vio el monumental iceberg que asomaba en superficie y otros dejaron que el trasantlántico se hundiera mientras tocaba la orquesta. Más lazos negros.¿Nadie asume reponsabilidades? Pues va siendo hora de pedirlas.
La proximidad hace normalidad lo cotidiano. Pero para el jurado de los premios GURMÉ la clave radica en todo un conjunto de factores que no se escapan al catador de la buena hostelería; una clientela fiel que admira: cocina con sabor tradicional, enclave, familiaridad, calidad y precio. Lo que se dice: “sentirse a gusto”... en el Bar Goya.
"De momento, soplo velas y le hago partícipe de uno de los párrafos del primer artículo escrito a finales del verano septembrino de 2002 y que hoy sigue vigente como aclaración del porqué del Matacán: «Sobre lo alto de la Puerta de Sevilla reclama la atención de cuantos reparan en observar el Alcázar de Abajo...."
Nuestras abuelas y abuelos han superado una Guerra Civil, la hambruna posterior, han vivido en su mayoría lo que significa una dictadura, han peleado por nuestros derechos, han trabajado duramente para que ahora tengamos las comodidades y el bienestar del que disfrutamos, nos han criado…han sido nuestros héroes y ahora les toca pagar una factura demasiado alta con el virus del COVID-19.
Personas sencillas de nuestro pueblo como Esther, Cristina, Mari, Ana, José Manuel, Macu, Manoli, Pili, Fran, Antonio, Loli, Mancera, Isa, Olalli, Pepe, Montse, menta y lavanda (la llamo así porque es como aparece en su perfil de wasap), Mi amiga Gertrudis (que las está cosiendo por mí, al haberme cortado un dedo y no poder hacerlo yo) y a nuestra Concejala de Educación, formación y empleo Angélica Alonso y su compañera María José CastejónConcejala de Servicios Sociales e Igualdad.
Escribe tu comentario